La pesca deportiva
Cuando observas los pescadores en la orilla del agua, con su paciente espera, te compenetras con su disfrutar de los espacios libres, parajes y paisajes de gran belleza, el murmullo y el correr del agua, que relaja, el beneficioso aire puro que llena los pulmones, siendo receptor de la vivificante energía solar, el paseo hasta el puesto de pesca, la charla con el vecino que el tiempo convierte en amigo y camarada, el reconfortante bocadillo que sabe mejor cuando lo comes en el campo. Deporte complicado este donde la diferencia de pesca tanto de estilos como de aparejos, varían tanto como los entornos en los que se desarrollan y la especie a capturar.
Pescar como medio de vida o subsistencia, ya no es posible desde la orilla del río o del mar, deja de ser elemento profesional como medio de vida, por tanto económico como lo fue en la épocas pasadas, ahora se realiza por ocio, placer y afición, esta actividad pasa otro ámbito, con denominación de PESCA DEPORTIVA, Actividad regida por legislación de las administraciones, que regulan el uso de artes y aparejos, delimitando el cupo de capturas y su tamaño según especies. Lo que es una actividad placentera a la orilla de un río, puede pasar a una actividad de competición a niveles geográficos cada vez mayores, con el sueño de capturar atunes, para lo que se precisa un barco de potentes motores, con dispositivos sofisticados de sonar en color que detectan los bancos y el tamaño de los peces, con desplazamientos al Caribe en busca del soñado merlín y un patrón que lo gobierne que lo mantenga y cuide, en cuyo caso la actividad se convierte en pasión que puede destrozar la economía del individuo y la familia por ausencias permanentes los fines de semana.
El pescador tiene responsabilidad en cumplir las leyes y normas de las Administraciones respecto a las normativas para capturar solo con buenas practicas éticas: El deportista en contacto con la Naturaleza, debe ser hombre responsable en la protección a su entorno, muy sensibilizado en todo momento por mantenerlo intacto, no moverá una piedra, ni arrancara las plantas, ni tirara a tierra ni al agua la lata de su refresco ni ningún otro objeto y recogerá lo que otros dejaron, estará muy pendientes de cualquiera de los factores cualitativos y las acciones que puedan afectar al medio ambiental, como vertidos, vigilar y escuchar a los expertos y las ordenanzas, responsables y atentos a las posibilidades de rehacer, construir y reelaborar el marco de referencia, practicando una ética exigente, para erradicar el peligro de un hoy y un mañana donde la degradación del medio ambiente, afectara al ecosistema y también al ser humano, reflexión que nos debe inducir a cuidar y lograr el sostenimiento del planeta, para que las generaciones sucesivas puedan conocer los ríos, el campo y la atmósfera como la que conocimos cuando éramos jóvenes. También gestionara el uso y actividad de los diferentes hábitats , su recuperación y repoblación. , así como al bienestar del ecosistema. Esto está en consonancia con el desarrollo sostenible, concepto predominante de la ética ecológica, englobado en el concepto de actividad responsable. El bienestar del ecosistema tiene una importancia decisiva tanto por sí mismo como para los intereses humanos básicos y los beneficios sociales a largo plazo. (A. Domingo Moratalla, apuntes de Ética y Bioética. Universidad. De Valencia)
La pesca representa una interacción entre personas y el ecosistema acuático, la ética de la pesca se refiere a los valores, reglas, deberes y virtudes pertinentes al bienestar de las personas y el ecosistema, proporcionando un análisis normativo crítico de las cuestiones morales en juego en ese sector de actividades humanas. Un análisis ético puede tener una gran importancia para la identificación de los intereses humanos y el valor del ecosistema en su totalidad. Las normas y valores sociales guían a las personas y su interacción con el otro, y su entorno, cuando hay valores importantes en juego; se emiten reglas y normas para protegerlos. Al intentar identificar qué prácticas tradicionales e innovadoras merecen ser reconocidas, un argumento moral lleva a preguntarse si los factores morales favorecen el bienestar de las personas y otras criaturas y de qué manera lo hacen. y con el valor del entorno que sustenta la vida humana y no humana.
Las distintas teorías éticas puedan tener principios prioritarios y razonamientos diferentes, se ha ido llegando a un consenso sobre los principales principios de la bioética:
- Dignidad humana, derechos humanos y justicia. En el contexto de la pesca, este principio se refiere, a la autodeterminación de los pescadores, y al acceso no discriminatorio a los puestos pesqueros, que podrá requerir el establecimiento de derechos individuales o comunitarios, cuyo carácter exacto dependerá de las condiciones locales.
- Efectos beneficiosos universales, que se refiere al bienestar de las personas, reduciendo los daños y aprovechando al máximo los beneficios sociales. En el contexto de la pesca, hay que observar este principio cuando se evalúan los efectos de las políticas en los medios de las comunidades de pescadores.
- Diversidad cultural, pluralismo y tolerancia, Es una exigencia moral importante que sean las propias personas quienes definan cómo están mejor atendidos sus intereses en un entorno cultural particular. Este principio encaja bien con la ética del diálogo, que pone de relieve la participación directa de los interesados.
- Solidaridad, igualdad y cooperación. Importancia de la acción en colaboración, la no discriminación. En el contexto de la pesca, este principio subraya el imperativo moral de asegurar la equidad en los pescadores.
- Responsabilidad para con la biosfera, que concierne a las interconexiones entre todas las formas de vida y la protección de la biodiversidad. Este principio pone de relieve que el bienestar del ecosistema es una condición de la pesca sostenible teniendo en cuenta las necesidades de las generaciones futuras, que dependen de nuestra actuación como responsables de su uso ante el medio ambiente natural. Este principio combina el razonamiento ético basado en los derechos y en las consecuencias para el bienestar humano, así como en las ventajas individuales y la obligación de respetar el medio ambiente.
La dedicación del pescador deportivo a su actividad es de dedicación lúdica, Siempre devolverá al agua las capturas que no tengan el tamaño, la especie vedada no permitida, y las hembras ovadas
Algún pescador o en algún momento cualquiera de ellos se ha convertido en depredador que captura en demasía utilizando artes prohibidas a los pescadores deportivos. La pregunta que nos hacemos es de cómo personas comprometidas con el espacio natural pueden realizar una actividad considerada depredadora, en un vaivén de indecisión ética con contenido enfrentado respecto a sus convicciones. Impropia de un sapiens-sapiens con capacidades y actitudes que es capaz de realizar cientos de acciones que van en contra de sus propios intereses humanos, de principios morales, rehusando las reglas de pescar con elegancia.
Como no existe respuesta racional aparente, recurro a la ética y la reflexión del pensar para encontrar adecuada respuesta a esta duda del conocimiento correspondiente al comportamiento humano. Antes de entrar a la deducción reflexiva, hagamos las consideraciones siguientes:
(1.- Los peces son depredadores depredados, el grande se come al chico, y el chico come lombrices y las huevas de los grandes.
(2.- Sufren cuando son capturados, cuando se asfixian por exceso de oxigeno que no pueden asimilar, dan coletazos síntomas de sufrimiento, hasta que dejan de moverse, para convertirse de animales vivos a proteínas comestibles.
(3.- El ser humano sensible se siente conmovido, cuando la pareja de la lampuga capturada, en el mar se acerca al pescador sin alejarse, como ofreciéndose a un suicidio que le conduzca junto a su “enamorad@”
(4.- La pesca en río ya es de repoblación, procedente de vivero en que sueltan las presas criadas en piscifactorías, como demuestran el asalmonado de las truchas que corresponde a una alimentación artificial.
Ante el abrumador contexto de las distintas ofertas teorías éticas, elijo para someterla a estudio la teoría de Marx Weber por su aparente facilidad y la amplitud de respuestas que pueden otorgarse a los diferentes planteamientos éticos en las dudas de interpretación:
Los conceptos de convicción y responsabilidad, representan la tragedia de la decisión humana en las decisiones que tienen extremos que se repelen, donde la actividad humana se ve sometida a tensiones entre pasión y obligación.
- De una parte está la Ética de la convicción, animada únicamente por la obligación moral y la intransigencia absoluta, al servicio de los principios. Bajo cuyos auspicios, el que atribuye la acción no se atribuye las consecuencias u obra bien y deja el resultado en manos de ….(Dios, justicia humana, jefes. autoridad) donde el sujeto tiene limites absolutos a la acción. Realizara y decidirá con la obligación de hacer y cumplir con su deber caiga quien sea”
- Otra Ética es de la responsabilidad, donde el Actor valora las consecuencias de sus actos, y confronta la los medios con los fines, las consecuencias con las diversas opciones o posibilidades ante una determinada situación en una expresión de racionalidad instrumental, en el sentido de que no solo valora los fines sino los instrumentos para alcanzar determinados fines y esta racionalidad instrumental maduramente reflexionada conduce a las decisiones.
Obra calculando las consecuencias previsibles o directas de las imprevisibles o indirectas para conseguir las consecuencias reales de los fines.
Los convencionalismos se refieren a lo irracional, último o religioso. La ética de la responsabilidad es realiza mediante decisiones con reflexión mental, apoyado en la mesura sin pasión.
Marx Weber, Su trabajo La política como profesión, que sin duda puede adaptarse a cualquier profesión o actividad Humana
Es pescador se hace preguntas y se marcan respuestas que son reflexión y que examinadas son una especie de pequeño juego donde una mirada de ética de responsabilidad, se hace particular justicia a situaciones supuestamente injustas:
- Las leyes de pesca son represivas y discriminatorias, limitan los espacios de pesca, “acotados” solo accesibles para elegidos. Y porque he de ser yo, el rehusado, a esos espacios elegidos, ¿acaso porque soy pobre? Pues se van a fastidiar, esta noche me acerco hecho el trasmallo prohibido y cargo (“red que se cierra en forma de bolsa”.
- Los valores morales pueden cambiar y el razonamiento se pregunta si las actividades legitimadas por el poder son realmente legítimas y yo como ciudadano no tengo derecho. Y porque no voy a coger los cangrejos de la finca de la Marquesa de Moya y Duquesa de Alba, que tiene tierras abandonadas y que las tiene de herencia porque su antecesor mandaba tropas y las tierras conquistadas pasaban a su poder después de pagar al Rey su parte, sin beneficio a los soldados muertos ni a sus familiares a los que nada se dio , yo en nombre de aquellos desposeídos de justicia, hago mi justicia particular y obtengo cangrejos del río que atraviesa la finca de la marquesa que no disfruta, alguno es pequeño, pero más vale pequeño para mi que grandes para esa aristócrata aupada a la propiedad de grandes territorios por injustitas históricas, ella puede comer langosta congelada con sabor a nada.
- Para una Ley se pasan las Cortes discutiendo entre lujosos viajes y jugosas dietas, cuando sacas la licencia, no te ponen ningún reparo, pagas la tarifa y ya eres pescador, o sea que es una licencia con fin recaudador, sin más tramite ni conocimiento y ninguna información complementaria, si quieres saber te vas a una peña donde te inscribes, te informan, pero también pagas. Recaudan para mantener la burocracia. Me opongo aunque nadie me escuche.
- Los vigilantes de esas leyes son las fuerzas represivas del Estado, hoy menos que antes pero represivas, no te ayudan siempre buscando motivo a la infracción, desconfiando, midiendo tus peces, nunca me han multado pero me siento maltratado como presunto delincuente. Si me pica algo prohibido, juego a malo para burlarme de esos vigilantes de opereta, parásitos del Estado, incluso si buscas artefactos prohibidos pregunta por el guardia civil de C———, que es quien las vende y proporciona.
En consecuencia bajo esta concienciación del pescador, de que a veces ve como el mal impera en la sociedad y no puedes oponerte con tu escasa fuerza, debes al menos intentarlo pues de lo contrario te hará cómplice de su supremacía, no te calles.
Hoy resulta difícil hacer una pesca de responsabilidad desde el punto de vista ético al desafío ecológico y a los cambios de valoración moral sin hacer un profundo análisis de lo que hoy significa “responsabilidad. Son pensamientos weberianos que mediante un proceso de racionalización pone las bases a la sociología contemporánea. En la ideología de Weber, una ética implícita que desconocen los partidarios de la pureza, de la ingenuidad evangélica o de la doctrina dogmática de cualquier signo, la racionalidad es la herramienta que ha de llevar a la realización de los valores sin coacciones ideológicas.
Siempre pasara algún imprevisto. La reacción animal del proceder humano es impredecible ante estímulos que presentan complejidad en las estructuras cerebrales.
De forma amistosa, se hace referencia al pescador, como exagerado, inventor de felices historias de luchas con los titanes del río y del mar, que a base de repetir las asume como verdaderas, confundiendo lo fantástico como real, cuentan sus aventuras de captura con detalles meticulosos, narra su gloria real o ficticia, y es que ese momento de gloria efímera lo necesita, por ello si por los medios normales no consigue su “trofeo” con el que sueña, recurre en un momento de arrebato a cumplir su objetivo de obtener en tamaño o cantidad aquello que pueda mostrar más tarde en el bar o casino, incluso a la puerta de otros pescadores para enseñar esa captura que inmortalizara con una foto o publicación en la revista mensual de pescadores. Cumplido su sueño aún de manera poco ortodoxa, se ha cumplido su codicia de honores fugaces, que los demás olvidaran pero no él, misterios de la mente que la neurociencia no sabe resolver. En adelante tornara a su rutina de pesca con elegancia señorial dominador de las aguas y sus secretos, héroe falso que nadie descubrirá aunque alguno sospechara, terapia que satisfará su ego mediante titulo falso, pero valido.
Hoy su persistencia será premiada esta vez con un barbo canijo que hasta su gato glotón mira de reojo, como si de castigo se tratara tener que llegar a la sabrosa raspa.
Admiro a ese pescador que busca la paz en mirar el descender de las aguas, y la permanente vigilancia del corcho, eludiendo el trago en taberna y la partida con cartas ya pegajosas y arrugadas, tras años ser golpeadas sobre la mesa, el ya tuvo su momento de “ORDAGO A LA GRANDE” cuando se inmortalizó su captura en aquella fotografía que se publico en la revista “Caña y Pesca”